21/8/12
Solo, de Nemo
Solo.
Mi mirada perdida
y la esperanza con ella.
Viendo noche tras noche
el rodar de una botella;
y en esta calurosa noche de agosto,
me trae el recuerdo
de otra diversión sin rostro.
Solo.
Como el rayo de luz
que se acurruca a mi lado.
Como un árbol desamparado
que resiste al viento,
que no comprende al viento
y se agita desesperado.
Solo.
Sin lagrimas ni enfado,
pero solo.
Imbuido
en un pensamiento sudado,
en un sentimiento derrotado,
en un grito desamarrado.
Solo.
Solamente solo;
mirando a la eternidad,
pero como todos,
desde el otro lado.
Solo.
Y me importaba cuando aún creía en algo,
pero ya desterré de mis noches difusas
las asediantes preguntas
de filósofo de parvulario:
aquellas que exigían significado:
¿esto para qué?, ¿esto bueno?, ¿esto malo?
Ahora sólo bebo, esnifo
y entre un manantial de risas,
ahogo lo que callo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario